Son ya once años lo que ha cumplido la fuente de la plaza y muchos días a la intemperie, y ha llegado el momento de una pequeña puesta a punto.
Su predecesora, aquella vieja fuente de 1772, también era conservada, según el Diccionario de Pascual Madoz, ‘con el mayor esmero por un alarife fontanero’.
En esta ocasión se han tenido que reponer las tuberías de desagüe entre las piletas y el pilón. También ha sido necesario rascar y volver a pintar el pilón con pintura especial.
Esperamos que estos arreglos sirvan para que continúe presidiendo la plaza Mayor del pueblo por mucho tiempo. También el cuidado y el civismo por parte de todos será fundamental para lograr este fin.