Como se vino anunciando a lo largo de la semana pasada, el sábado 7 de mayo se celebró la letanía de San Roque. Una lástima que se anunciaran tantas lluvias, cuando en realidad hizo un día precioso.
Con todo, se acudió a la ermita del santo donde se ofició la misa y rogativa y, como ya estaba todo preparado, por si acaso, la comida popular tuvo lugar en el frontón municipal.
Menos asistencia de vecinos e hijos del pueblo que otros años, pero aún así, se repartieron unos 170 cuencos de caldo, huevos fritos, jamón y flanes.