Obras en el molino

Se ha comenzado una nueva fase de obras en el molino de viento en las que se intentan solucionar los problemas con la cubierta. Para ello, se ha aplicado una capa de aislante sobre la madera que hasta ahora quedaba vista, y que comenzaba a deteriorarse de forma evidente.
Esta operación se finalizará con la colocación de una fina chapa lacada en negro que, desde ahora, dará otro aspecto distinto al edificio -ni mejor ni peor que el anterior- y que acabará con el problema de mantenimiento que tenía hasta ahora.
Por último, gracias a una ayuda concedida por la Junta de Castilla-La Mancha, se va a iluminar el edificio con proyectores, lo que realzará la figura de este Bien de Interés Cultural.